Siempre vuelvo y no voy por miedo a irme otra vez (2022)
archival home videos, bird sound, universe sound / 02:59 s
The video, in essence, becomes an organic blend. Using the small book as a foundation and script, the artist realized that the majority of the images described were connected to nature. This made perfect sense to her, as she understood that it is in nature where we coexist, and it was there that she shared those experiences with her grandmother. It is also the place where her grandmother now rests. For the sound in this video, the artist conducted various tests until achieving the desired result. Her aim was to create an atmosphere where the visual image and the sound were not entirely connected—something decontextualized that would generate a mysterious space.Initially, she experimented by using only the sound of birds, a recording made in the garden of her home.
This sound completely evokes nature for her, a state of absolute relaxation and contemplation. When she integrated this sound with the video, she realized something was missing. Therefore, she decided to mix it with the sounds from her family archive videos, which included family dialogues and background noise. Only these sounds, along with the birdsong, were audible. The videos of the newly created archive from this year were muted, as she considered that the images of nature required nothing more than the sound of the birds. Finally, she mixed the sound with recordings of the universe obtained from NASA.
Just as files and records crumble and decay, and computers become infected with viruses that corrupt or render archives inaccessible, so too do our memories. In a sense, all memories are forgotten. Memories are built on loss. When we remember, we rescue forgotten experiences from oblivion. They need to be rescued because they have come to an end. These experiences are complete and have been consigned to memory. (Shields, David. Reality Hunger. 2015. Chapter: "Memory," 76.)
Siempre vuelvo y no voy por miedo a irme otra vez (2022)
videos caseros, sonido de pájaros, sonido del universo / 02:59 s
El video, en esencia, se convierte en una mezcla orgánica. Usando el pequeño libro como base y guion, la artista se dio cuenta de que la mayoría de las imágenes descritas estaban conectadas con la naturaleza. Esto tenía mucho sentido para ella, ya que entendía que es en la naturaleza donde coexistimos, y fue allí donde compartió esas experiencias con su abuela. También es el lugar donde su abuela ahora descansa.
Para el sonido de este video, la artista realizó diversas pruebas hasta obtener el resultado deseado. Su objetivo era crear una atmósfera en la que la imagen visual y el sonido no estuvieran completamente conectados, algo descontextualizado que generara un espacio misterioso. Inicialmente, experimentó usando solo el sonido de los pájaros, una grabación hecha en el jardín de su casa.
Este sonido evoca completamente la naturaleza para ella, un estado de relajación absoluta y contemplación. Cuando integró este sonido con el video, se dio cuenta de que algo faltaba. Por lo tanto, decidió mezclarlo con los sonidos de los videos del archivo familiar, que incluían diálogos familiares y ruido de fondo. Solo esos sonidos, junto con el canto de los pájaros, eran audibles. Los videos del archivo recién creado de ese año fueron silenciados, ya que consideró que las imágenes de la naturaleza no necesitaban más que el sonido de los pájaros. Finalmente, mezcló el sonido con grabaciones del universo obtenidas de la NASA.
Tal como los ficheros y los expedientes se desmoronan y se pudren, y los ordenadores se infectan con virus que corrompen o vuelven inaccesibles los archivos, así ocurre con nuestros recuerdos. En un sentido, todos los recuerdos se olvidan. Los recuerdos se basan en la pérdida. Al recordar, rescatamos del olvido las experiencias olvidadas. Es necesario que se las rescate porque han llegado a su fin. Dichas experiencias están completas y han sido relegadas a la memoria. (Shields, David. Hambre de realidad. 2015. Capítulo: “Memoria,” 76.)